jueves, 22 de noviembre de 2007

Colegios Privados

No me acuerdo si os he contado alguna vez cómo perdí la virginidad. Seguramente sí, pero lo voy a contar otra vez again para los que acaban de llegar.

Antes de nada, me gustaría aclarar que fui educado en un colegio privado. Debido a esta desgracia, me veo en la obligación de saludar a la gente mayor, cederles mi asiento a las embarazadas y obedecer los mensajes que hay escritos en la pared. Mi cabeza funciona así, fui educado así y quien no piense así es un fascista.

La semana pasada fui a visitar a Puag a Venecia. Una vez allí, el pobre Pablo se acercó a un escaparate y se agachó para mirar el precio una gabardina (la peor prenda que existe, sin duda). Inesperadamente, pude leer el la pared "LA CÓPULA", y una voz dentro de mí no paraba de gritarme que saliera corriendo hacia el culo de Pablo, que me bajara los pantalones y que procediera a realizar "LA CÓPULA".

Estas son nuestras caras, que hablan por sí mismas: Mientras que la mía es todo felicidad y gozo por haber perdido mi virginidad, la de Pablo muestra estupefacción ante su misma pérdida.

Y es que, como siempre digo, nunca llueve a gusto de todos.


No hay comentarios:

@@ Si te ha ofendido el contenido de la página, mándame un email y te contesto con una ofensa de verdad. Gilipollas @@